Jorge Dixon compartió con el padre de la ex Mandataria tras ser encarcelado y torturado como presunto "conspirador".
Esta experiencia quedó plasmada en el libro "Aviación contra Bachelet y Otros".
Alberto Bachelet murió a consecuencia de las torturas de sus camaradas de armas. Dixon cree que "no existe conciencia de lo que realmente pasó en la Fuerza Aérea".
El subteniente en retiro de la Fuerza Aérea Jorge Dixon R. recordó este martes, en conversación con Cooperativa, cómo se produjo el deceso del general Alberto Bachelet, el 12 de marzo de 1974 en la Cárcel Pública de Santiago, producto de un infarto originado por las torturas ejecutadas por sus propios camaradas de armas.
Dixon tenía 22 años al momento del golpe militar. Estudiaba Ingeniería Aeronáutica y era subteniente de la FACh. Acusado de participar en un complot liderado por Bachelet fue procesado y torturado junto a otro centenar de uniformados.
La Fiscalía de Aviación los procesó como "conspiradores" en un Consejo de Guerra caratulado bajo el Rol 1-73, "Aviación contra Bachelet y Otros", nombre de un libro de reciente publicación en el cual Dixon relata su experiencia.
El 12 de marzo de 1974 en la Cárcel Pública "había una misa, había llegado un capellán. Él (Bachelet) al igual que yo, no iba a misa. Lo veía que estaba lavando los platos, porque él ese día estaba de turno -teníamos turnos de aseo y de lavado de platos donde todos teníamos que cumplir esa misión-. De lejos lo miré y pensé: 'Algo le pasó'", porque "se fue rápidamente a su celda y se recostó en una de las camas".
"Yo y otras personas nos acercamos a ver qué sucedía. Él solicitó unos medicamentos y llamamos al doctor (Álvaro) Yáñez -al 'doc', como le decíamos- y el doc lo examinó e inmediatamente dijo: 'Está teniendo un ataque al corazón'", recordó Dixon en Una Nueva Mañana.
El médico "lo puso en el suelo (a Bachelet), le empezó a dar masajes al corazón... Como veía que no se recuperaba empezó también a darle respiración boca a boca. Al poco rato apareció el alcaide de la cárcel. El doc solicitó que por favor tenía que llevar al general a un centro asistencial -de hecho el Hospital J. J. Aguirre queda como a cinco minutos del lugar- y el alcaide dijo: 'No, nosotros no podemos llevar a nadie sin previa autorización por escrito'; en otras palabras: 'Que se muera nomás...'", aseveró Dixon.
"Álvaro (el médico) trató por todos los medios de reanimarlo, pero no contaba con los recursos para poder hacerlo", indicó el oficial en retiro.
Sobre Matthei
Jorge Dixon desechó atribuir responsabilidad directa en la muerte de Bachelet al general en retiro Fernando Matthei, quien tras el golpe fue designado jefe de la Academia de Guerra Aérea, lugar donde fue torturado Bachelet.
"La responsabilidad de la Academia de Guerra Aérea era de la Fiscalía de Aviación, en este caso el general (Orlando) Gutiérrez. Matthei, que era coronel, director de la Academia, en papel era responsable, pero más allá de eso... Es una cosa netamente personal, si él se siente culpable o no culpable por no haber podido hacer algo al respecto", opinó.
Dixon estuvo más de un año preso en la Cárcel Pública y hoy asegura que "no existe conciencia de lo que realmente pasó en la Fuerza Aérea".
También apunta que, si bien, "en general se piensa que los torturadores son personas de baja educación", en realidad "la mayoría de los torturadores (en la FACH) eran oficiales, ingenieros aeronáuticos", tal como él.
