La Sala del Senado debatió este martes por la tarde el proyecto que rebaja de dos tercios y tres quintos a uno uniforme de cuatro séptimos el quórum de reforma de la Constitución vigente, pero no lo votó tras una solicitud del senador Juan Ignacio Latorre (RD) -crítico de la "premura" de la tramitación- para que se desarrollara una segunda discusión en una próxima sesión.
En una tensa reunión realizada el lunes, los jefes de los comités acordaron poner en tabla este martes la reforma, originada en una moción de los senadores DC Ximena Rincón, Matías Walker e Iván Flores, y del independiente de la bancada PPD Pedro Araya.
Así las cosas, se desarrolló la sesión en Sala, durante la cual intervinieron 12 senadores de todos los sectores, sin embargo, sin votación debido a la petición de Latorre.
El parlamentario frenteamplista cuestionó que "había mucha premura de que se vote con urgencia hoy", pese a que -recordó- "es una moción parlamentaria que no tiene urgencia del Gobierno, y hay otros proyectos que nos parecen más relevantes".
"Pero más allá, la discusión de fondo es por qué las fuerzas políticas (la derecha) que se han opuesto por 30 años a reformas y dejar atrás la Constitución del 80, de la dictadura, reformada por el Congreso binominal en el Gobierno de Lagos, ahora están tan apurados y ansiosos de que se vote rápido", inquirió también.
Por ello, Latorre instó a sus pares a que "dejemos que la ciudadanía se exprese el 4 de septiembre; este debate sobre reforma constitucional puede que sea necesario o no a partir del 5 de septiembre, pero no es urgente votarlo hoy día".
No obstante, en el sector oficialista denominado "Socialismo Democrático" la iniciativa genera algunas diferencias. Así como hay senadores del PPD abiertos a aprobar, en el Partido Socialista hay mayor incomodidad pues consideran que avanzar en este asunto en estos momentos sería un insumo al Rechazo para el plebiscito de septiembre, opción que apoyan abiertamente dos de los impulsores del proyecto, Rincón y Walker.
En la derecha, por su parte, reprocharon la jugada dilatoria del senador Latorre, militante de Revolución Democrática, partido que integra Apruebo Dignidad, la principal coalición del oficialismo.
El Evópoli Luciano Cruz-Coke destacó que el rebajar el quórum de la Carta Fundamental vigente "da un camino y cierta certeza a la ciudadanía, y hoy, como estamos viendo, hay dos alternativas perfectamente legítimas", en alusión al Apruebo y el Rechazo en el plebiscito.
"Y si hoy estamos poniendo esta propuesta, que se debatió y aprobó por unanimidad en comisión, y que cuenta con los votos para ser aprobada (en Sala), resulta francamente absurdo que el Partido Comunista y Apruebo Dignidad se estén oponiendo", fustigó.
"Cabe preguntarse -continuó- por qué aquellos que se opusieron al acuerdo del 15 de noviembre hoy día están señalando que no quieren poner en votación este proyecto, y están haciendo maniobras dilatorias, señalando que los que no quieren cambios (se supone) son los adversarios de oposición".
La reforma en cuestión fue visada la semana pasada en la Comisión de Constitución, y en su futura votación en Sala requiere el apoyo de 33 senadores para ser aprobada y avanzar a la Cámara de Diputadas y Diputados para su segundo trámite.
