El economista PS y ex presidente de Codelco Óscar Landerretche Moreno realizará en los próximos meses una gira por Chile para decidir si se lanza, finalmente, a la carrera presidencial; opción que abrió públicamente hace un mes en una entrevista.
Según informó La Tercera, el académico del Departamento de Economía de la Universidad de Chile viene analizando el tema desde mediados del año pasado, y pretende medir, en encuentros que hará en diferentes ciudades, la acogida a las ideas que plantea en su último libro, "Chacota: la República en la era del populismo", donde aboga por una reforma profunda a las instituciones -que considera en severa crisis-, un cambio al modelo de desarrollo y "barrer con el clientelismo en todas las esferas del Estado".
"Tómate esto en serio"
Landerretche, de 46 años, militante socialista desde 1990 y padre de cuatro hijos, es asesorado, según el matutino, por una especie de "comité de exploración"; personas ligadas desde la DC a Revolución Democrática que lo ayudan a definir si asume el reto.
Además, participa junto a los senadores PPD Ricardo Lagos Weber y Felipe Harboe de un chat de conversación llamado "Deep State", que reúne a figuras ligadas desde Red Liberal hasta el Frente Amplio, donde abordan distintos temas.
La Tercera cuenta que cuando se abrió a ser candidato, uno de los primeros telefonazos que recibió fue del presidente del PS, Álvaro Elizalde, a quien conoce desde la época universitaria: "Si estás disponible, bienvenido. Cuentas con todo el apoyo del PS. Óscar, tómate esto en serio. Te conozco. Si realmente quieres, tómate esto en serio", le dijo el timonel.
"La alternativa Landerretche"
Óscar Landerretche Moreno es hijo del también socialista y economista Óscar Landerretche Gacitúa. Vivió casi toda su infancia en el exilio y, tras su regreso a Chile, comenzó a militar a los 18 años, pero nunca ha ejercido un cargo institucional en el partido.
En 2005 fue secretario ejecutivo de la campaña de Michelle Bachelet y en 2009 coordinador programático de la campaña de Eduardo Frei. Pese a haber presidido Codelco y sido víctima de un mediático atentado terrorista, su nombre es poco conocido a nivel ciudadano: sólo 26 por ciento, según la encuesta Cadem, en números públicados hoy por El Mercurio.
El sondeo le da a Landerretche, tanto entre quienes se identifican con el Partido Socialista como con la centroizquierda, un 4% de intención de voto.
Las preferencias presidenciales entre quienes se identifican con el Partido Socialista y la centroizquierda, según Cadem. (Fuente: El Mercurio)
También en las páginas de El Mercurio, el columnista Daniel Mansuy llamó la atención sobre la irrupción de "la alternativa Landerretche", y dijo que "se trata de un académico que nunca ha sido candidato a cargos de elección popular, que no ha sido medido en encuestas, y cuyo porcentaje de conocimiento es escaso (o derechamente nulo) más allá de la élite. Y, sin embargo, su anuncio produjo un efecto singular, al concitar apoyos variados sin casi recibir críticas".
"Este fenómeno admite varias explicaciones. Por un lado, Landerretche puede representar un recambio auténtico, que excede el plano meramente generacional (...) Aunque siempre ha pertenecido al mundo político (y, muy importante, no reniega de él), su trayectoria le permite alcanzar un registro algo distinto. Si se quiere, tiene la distancia perfecta con la política activa. Su proyecto no es personal, (...) tiene un discurso y un diagnóstico sobre la situación del país, (...) el hombre tiene un marco comprensivo a la hora de enfrentar la realidad", y destaca en "su sector, (que) se parece a una tierra arrasada que hace mucho tiempo perdió toda capacidad de orientación", escribe el intelectual de derecha.
Para Mansuy, "Landerretche encarna a la perfección el ethos socialdemócrata liberal que nuestra oposición viene rechazando sistemáticamente desde hace años, (...) un revisionismo muy severo respecto de la trayectoria que ha seguido la centro-izquierda desde el 2010 hasta acá", pero su "principal dificultad viene por otro lado" y "se trata del espectro Michelle Bachelet, que está más vivo que nunca", pues "la mera posibilidad de regreso distorsiona cualquier composición de lugar".
