El Presidente se confesó en una extensa entrevista con el diario El País de España.
Dijo que a veces siente "angustia al ver cómo algunos se esfuerzan para lograr que el país retroceda".
El Mandatario afirmó que la popularidad de Michelle Bachelet es "paradójica".
El Presidente Sebastián Piñera concedió una extensa entrevista al diario El País de España, que se publica en la edición de este domingo, y en la que aborda una serie de aspectos de la contingencia nacional; entre ellos la conmemoración de los años del golpe de Estado, la próxima elección presidencial e incluso su posible repostulación el año 2017.
"¿Le pesa dejar la Presidencia sin ser más querido por la gente?", le preguntó directamente Javier Moreno, autor de la nota: "Es posible, es posible", respondió el Mandatario.
"Mucha gente me decía a mí: 'Una persona como tú, que has sido un empresario exitoso, que tiene una situación económica muy acomodada, que no proviene del mundo tradicional de los partidos políticos, nunca va a llegar a ser Presidente', y desde ese punto de vista creo que esos mismos factores, si bien son un activo que me ha ayudado mucho para enfrentar la responsabilidad de ser Presidente, también son causa de un cierto distanciamiento de la gente", reflexionó Piñera antes de "hacer una pausa" y "pensar cuidadosamente" lo que diría a continuación, según cuenta Moreno.
"Es verdad -si usted quiere que yo le diga con toda honestidad- que yo hubiera esperado y me hubiera gustado, dado el tremendo esfuerzo que hemos puesto en esto, y los resultados, que son muy promisorios, que hubiera querido y esperado una aprobación mayor", confidenció entonces el Jefe de Estado.
Piñera no "confirma" ni "descarta" volver a postular a La Moneda: "Lo pensaré en el momento oportuno", dijo. (Foto: EFE)
"A todos nos gusta que nuestros seres queridos nos quieran más, nos cuiden más; y a todos los políticos nos gusta que nuestra ciudadanía nos aprecie más y nos quiera más. Pero con toda franqueza, si yo tengo que escoger entre los resultados reales de la sociedad chilena y de la economía chilena y los resultados de los encuestas, no dudo un segundo en privilegiar los primeros", agregó.
"En lo más personal, me gustaría (...) ser recordado como un Presidente que entró con el pelo negro y sale con el pelo blanco y que no ha dejado de trabajar un solo día, incansablemente, con mucha vocación y compromiso", declaró el Mandatario.
Pensando en 2017
El autor de la nota señala que considera "evidente" que el poder "ha cambiado" a Piñera "para bien" en relación con la vez anterior en que lo entrevistó. Ahora lo encontró "menos impulsivo, (más) consciente de los límites de la realidad, de la gigantesca tarea que supone gobernar; de las posibilidades del poder para mejorar las vidas de sus conciudadanos, pero también de sus límites y sus impotencias".
"Yo sabía que gobernar era difícil, y por tanto yo no me atrevería a decir que es más difícil de lo que creía. Lo que sí me hace reflexionar es que, a veces, a uno le baja una cierta angustia al ver cómo uno se esfuerza tanto por lograr que el país avance y otros se esfuerzan lo mismo o más para lograr que el país retroceda", expresó en tal sentido, agregando a renglón seguido que no se arrepiente de haber asumido tal responsabilidad.
"No me arrepiento, porque hay muchos que dicen que ésta es la casa donde tanto se sufre y, sin embargo, yo veo que todos mis antecesores, salvo el Presidente Aylwin -porque tenía mucha edad- han tratado de volver a sentarse en este mismo escritorio: el Presidente Frei, el Presidente Lagos, la Presidenta Bachelet", apuntó.
Consultado por su propia opción de repostularse a la Presidencia el año 2017 dijo no saber y estar "feliz de no saberlo".
"Le cuento algo: mi mujer (Cecilia Morel) me dice, cuando se refiere a esto: 'Ni lo pienses'. ¿Sabe lo que eso significa? Es como sinónimo de 'por ningún motivo' (...) Le digo a mi mujer que le voy a hacer caso: no lo voy a pensar por ahora; lo pensaré en el momento oportuno. No lo puedo descartar; tampoco lo puedo confirmar", indicó.
"Estoy feliz de que así sea, porque la verdad es que yo tengo plena conciencia que la vida no termina cuando uno sale de este Palacio de La Moneda. Yo, al menos, tengo muchos proyectos, muchas ideas que me gustaría realizar. No voy a volver al mundo de las empresas; voy a seguir en el mundo de lo público. ¿Desde qué trinchera? No lo sé y estoy feliz de no saberlo. Esa cuota de incertidumbre es sinónimo de una cuota de libertad", reflexionó.
"Cuatro años es poco tiempo", fue otra de sus frases al referirse a la próxima contienda presidencial, instancia que aprovechó para destacar el "legado" de su Gobierno, que identificó con "haber reconstruido el país en cuatro años, cosa que nadie creía posible; haber logrado recuperar el liderazgo y el dinamismo de crecimiento y creación de empleo, que lo habíamos perdido; haber logrado reducir la pobreza y lograr mayor igualdad de oportunidades; haber logrado grandes reformas en el terreno institucional y político y haber puesto a Chile a pie firme y seguro en el camino hacia lograr antes de que termine esta década derrotar la pobreza, derrotar el subdesarrollo y transformarse en un país que aproveche en plenitud su potencial y que le dé a todos sus hijos oportunidades para desarrollar sus talentos y seguridades de una vida digna".
Uso electoral de la conmemoración del golpe
El Presidente también abordó en su diálogo con El País -que tuvo lugar el pasado lunes 9- "la conmemoración o recuerdo de los 40 años del golpe militar", que definió como "muy intensa" y que, indicó, "ha revivido muchos sentimientos y emociones que fueron parte de la sociedad chilena en los últimos 40 años".
Piñera aseguró que entre "la gente común y corriente, los ciudadanos", sí se ha producido una reconciliación, mucho más "que en los políticos", situación que vinculó con la contienda eleccionaria.
"Yo pienso que el hecho de que estemos en plena campaña electoral incorpora un factor que hace que ambas partes, y particularmente una de ellas, la izquierda, crean que este escenario de volver a revivir los mismos odios, querellas y divisiones que ocurrieron el año 73, los pueda favorecer electoralmente", manifestó.
"Todavía las coaliciones políticas chilenas están determinadas en función de a qué lado estuvieron durante el gobierno militar, y eso es algo que algún día va a tener que desaparecer, porque para mí sigue siendo algo difícil de entender que la Democracia Cristiana, que en todas partes del mundo es un rival, un adversario del socialismo, aquí estén aliados y, por tanto, creo que algún día las coaliciones políticas en Chile se van a estructurar y organizar no en función del pasado, sino que en función de los proyectos de futuro", presagió.
Bachelet y la izquierda latinoamericana
Piñera fue interrogado, además, por la alta popularidad de Michelle Bachelet y la posibidad de que ella, siendo su antecesora, sea también quien lo suceda.
"Ésa es una paradoja que acepta muchas explicaciones: ella es una mujer que por su historia personal, por su personalidad y su carisma logró sintonizar muy bien con el pueblo chileno. No durante todo su Gobierno, sino más bien al final. De hecho, salió con una alta popularidad como Presidenta de Chile. Después se fue de Chile y [evitó] toda esta degradación de la política que han expresado los ciudadanos, porque hoy en día son mucho más severos y exigentes para evaluar al Presidente, al Gobierno, a la Alianza, a la Concertación, a la Cámara de Diputados, al Senado. Y ella logró salir de ese mundo. Y por tanto la gente la aprecia como fuera de ese mundanal ruido", explicó.
Otro factor que explica el respaldo a Bachelet es que "América Latina ha sido siempre un continente más de centroizquierda que de centroderecha".
"Vea usted los Gobiernos históricos y actuales en América Latina: la gran mayoría son de centroizquierda. Porque la centroizquierda promete la mano y la centroderecha, en cierta forma, promete la mano invisible de Adam Smith, que la economía de mercado va a producir más bienestar y va a mejorar la calidad de vida. El socialismo promete la mano visible del Estado, que el Estado le va a resolver todos sus problemas; que los ciudadanos tienen derecho a que el Estado les resuelva todos sus problemas. En cambio nosotros decimos que juntos tenemos que resolver los problemas y que cada uno tiene que hacerse responsable de su propia vida y el Estado, por supuesto, tiene que crear las condiciones para que todos puedan desarrollar sus habilidades y sus capacidades y tiene que ayudar a los que más lo necesitan. Entonces, también, pienso que desde ese punto de vista es más fácil ser candidato con ideas de centroizquierda que ser candidato con ideas de centroderecha. En Chile y en América Latina", sentenció Sebastián Piñera.
