La integran seis instituciones de educación superior de la Región.
Buscarán la inclusión social de estudiantes con discapacidad.
Las instituciones deberán implementar mecanismos que faciliten la inclusión de estudiantes con discapacidad.
La primera Red de Educación Superior Inclusiva de la Región de Ñuble (RESI) fue conformada en el marco de la Ley 20.422, que establece normas para la igualdad de oportunidades e inclusión social de las personas con discapacidad.
La convocatoria fue realizada por el Servicio Nacional de la Discapacidad (Senadis), logrando una acogida favorable de parte de rectores y autoridades académicas de seis universidades y centros de formación técnica con asentamiento en la región.
La seremi de Desarrollo Social, Doris Osses, señaló que "este es un hito de relevancia para Ñuble que nos permitirá trabajar sobre la igualdad de oportunidades y la inclusión social desde el área de la educación superior".
Las instituciones que acogieron el llamado son la Universidad Adventista, Universidad Pedro de Valdivia, Universidad del Biobío, Universidad La República, Instituto Santo Tomás y el Instituto Profesional Virginio Gómez.
Las instituciones deberán implementar en forma progresiva mecanismos que faciliten la inclusión de estudiantes con discapacidad, es decir, espacios e infraestructura que favorezcan el acceso inclusivo, adaptaciones curriculares y la presencia de personal especializado como, por ejemplo, interpretes en lengua de señas para jóvenes sordos.
Sergio Arévalo, director regional del Senadis, indicó que "en el primer encuentro se estableció un compromiso de participación y colaboración para poder fortalecer y emprender acciones en favor de las personas con discapacidad que pasan por estas casas de estudio".
Actualmente, en la Región de Ñuble existen 25 estudiantes de educación superior que tienen convenios con Senadis para el financiamiento de intérpretes en lengua de señas, apoyo en movilización y apoyo profesional de especialistas para sus estudios.
