Más de 200 fichas y 52 observaciones técnicas presentaron vecinos que se oponen al proyecto de extracción de áridos desde el río Itata, que se encuentra en proceso de calificación en el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) de Ñuble.
El proyecto impulsado por la empresa Aninat Limitada, considera una extracción de 500 mil metros cúbicos de material pétreo proveniente del cauce del río Itata durante un período de 11 años, con un costo de inversión de dos mil millones de dólares.
El pasado 13 de febrero fue ingresado por la empresa al SEA y esta semana correspondió la presentación de observaciones ciudadanas, de manos de vecinos de las comunas de Ránquil, Bulnes y Quillón, quienes se oponen argumentando potenciales daños ambientales, a la agricultura y el turismo.
Ricardo Torres, vecino de Bulnes y presidente del Comité de Defensa de la Cuenca del Valle del Itata, señaló que se trata de una extracción de recursos no renovables, motivo por el cual preocupa el deterioro de la cuenca y la pérdida de riberas, la posible afectación a las napas de los pozos profundos de agua potable rural y el desmedro al desarrollo turístico del territorio.
Proceso de extracción
Otro aspecto tiene relación con la fiscalización al proceso de extracción. "El proyecto no explicita como demostrarán que la extracción efectiva comprometida por la empresa, y eso es una falta grave, porque si se aprueba el proyecto podrían ser mayor y eso no hay como fiscalizarlo", subrayó Ricardo Torres.
El concejal de Ránquil, Felipe Rebolledo, agrega por su parte que "las cifras indicadas por la empresa dan cuenta de una extracción de 50 mil metros cúbicos por año, lo cual no justifica donde está el negocio, dada la alta inversión, gastos operacionales y derechos de extracción a los cuales debe incurrir el privado. De modo que estamos cansados de empresas que para la aprobación de un proyecto dan una cifra de extracción mucho menor a la real".
El Servicio de Evaluación Ambiental tiene hasta el 9 de agosto para notificar sobre estas observaciones a la empresa, que deberá luego responder a cada punto para presentarlo a la Comisión de Evaluación Ambiental de Ñuble.
