La defensora de la Niñez, Patricia Muñoz, emplazó al Ministerio de Salud a que cumpla sus compromisos para con los menores afectados por la contaminación en la zona de Quintero y Puchuncaví, luego de conocer los resultados de dos estudios de la Universidad Católica de Valparaíso.
Uno de ellos, de la Escuela de Trabajo Social en conjunto con la Defensoría, que "evidenció la percepción de riesgo y vulnerabilidad en niños, niñas y adolescentes, los cuales expresaron una noción de amenaza por parte de una actividad industrial irresponsable".
La psicóloga Claudia Espinoza, docente la casa de estudios, explicó que "lo que identificamos es que hay una saturación de la información" y que "los relatos (de los niños) son consistentes, se repiten una y otra vez, son transversales, las experiencias son compartidas: es un dato altamente consistente".
Detalló que "participaron niños desde nueve años hasta 17 años de edad, concentrados entre 11 y 15 años los que resultaron más afectados", asegurando que "hay indicadores suficientes para hablar que tienen connotación traumática, altos niveles de ansiedad, preocupación por el futuro".
El documento también arrojó luces sobre cómo abordar la situación mediante la integración de los menores en políticas públicas.
Metales pesados en niños
Otro análisis ejecutado por la Escuela de Agronomía de dicho plantel de estudios superiores detectó la presencia de arsénico en hortalizas y, además, de metales pesados en pelo y uñas de niños de Puchuncaví, lo que puede tener efectos cancerígenos a futuro.
La investigadora Maite Berasaluce, quien realizaba este seguimiento desde el año 2016, dijo que "existe exposición (a metales pesados) en estos menores de edad, que en este caso son 71 y que en total, dependiendo de la zona, hay exposición a metales entre los 205 participantes que estuvieron colaborando en el estudio".
"Encontramos además que existía riesgo para la salud de los niños de 1 a 5 años por estar expuestos a polvo con altas concentraciones de arsénico", lo que según la Agencia de Protección Medioambiental de Estados Unidos "genera riesgo a presentar cáncer en alguna etapa de la vida", añadió.
En este marco, la defensora de la Niñez recordó que "la Corte Suprema instruyó a determinar cuáles eran los agentes contaminantes y, por lo tanto, cuáles son las prevalencias de enfermedades que estarían asociadas a estos procesos de contaminación".
Por ello, y ante estos estudios, Muñoz remarcó que "hemos oficiado al ministro (de Salud, Jaime) Mañalich para poder conocer específicamente cuáles son las acciones que ya se han desplegado para lograr determinar aquella situación".
Asimismo, la autoridad apuntó que "hemos solicitado que se dé cumplimiento a un compromiso que adquirió el Presidente de la República con los niños y niñas y adolescentes de esta zona, en orden a realizar exámenes respeto a la situación de tener o no presentes en su cuerpo metales pesados, que se prometió en septiembre de 2018 y que a la fecha no se ha ejecutado".
