La Fundación Justicia por Amor, que asesora a la familia de Víctor Reyes, acusa negligencia médica.
El hombre de 55 años murió en su casa de la comuna de Molina hace dos semanas.
El informe de la auditoria interna aún está pendiente.
Hasta la justicia llegará la familia de Víctor Reyes, hombre de 55 años que murió luego de que le cortaran el pene en el Hospital de Curicó, en un procedimiento médico que para la familia del paciente, fue deficiente.
Así lo planteó la Fundación Justicia por Amor de Curicó, entidad que asesora al círculo íntimo del hombre que perdió la vida hace dos semanas, tras la intervención quirúrgica realizada en el centro asistencial de la ciudad.
"Murió con orificios en su zona íntima, con mucho dolor y se le hicieron más de 15 transfusiones de sangre, fue muy dramático y no quisimos hacerlo público en el momento porque estaba la Fiesta de la Vendimia e iba a perder notoriedad mediática", dijo a Cooperativa Regiones Erika Adasme, presidenta de la fundación.
La asesora de la familia agregó que "el caso ya está en manos de los abogados, se realizarán acciones legales por la negligencia que tuvo el médico al no derivar al paciente desde un comienzo a un especialista, porque el protocolo señala que no debió existir ningún procedimiento al paciente en Curicó".
El pasado 28 de enero, el Hospital de Curicó instruyó una auditoria interna para determinar las responsabilidades y el actuar del doctor Óscar Sánchez, que intervino al paciente. Desde el recinto informaron que la indagatoria sigue en curso.
