El Ministro de Relaciones Exteriores, Heraldo Muñoz, dio a conocer los tres nombres que reforzarán el equipo con el que se enfrentará la nueva etapa del proceso ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
El canciller remarcó que esta "es una etapa muy distinta a la anterior que era eminentemente procesal y preliminar. Ahora haremos uso de todos los argumentos y elementos de carácter histórico, político, jurídico y todo ello sustentado en la fuerte base comunicacional".
Para ese propósito, se nombró al periodista Ascanio Cavallo como coordinador de comunicaciones y de acuerdo al ministro Muñoz, será responsable de "desarrollar la narrativa" de esta fase.
De todos modos declinó que Cavallo asuma el rol de vocero de la postura chilena, responsabilidad que continuará como una de las tareas del canciller y de la Presidenta.
Adicionalmente se sumará al equipo el historiador y experto en relaciones internacionales Joaquín Fermandois, quien liderará un equipo que se centrará en el análisis de los elementos históricos que, según defiende Bolivia, demostrarían que Chile se comprometió durante el último siglo a entregarle una salida soberana al mar.
Finalmente el actual subsecretario de las Fuerzas Armadas y ex embajador en Colombia y Cuba, Gabriel Gaspar, ejercerá como embajador en misión especial para la demanda en la CIJ, con el objetivo de reforzar el despliegue en el exterior de los expresidentes y parlamentarios.
"Estamos muy complacidos de tener a personeros de este nivel colaborando de manera permanente con lo que viene por delante", agregó el Secretario de Estado, quien indicó que los tres nominados y sus respectivos colaboradores se sumarán al equipo que ha representado a Chile desde el comienzo del proceso, encabezado por el agente Felipe Bulnes.
"Estas tres personalidades que anunciamos hoy nos parece que es como sumar a Alexis (Sánchez), (Arturo) Vidal y (Eduardo) Vargas a un equipo ya muy afiatado y de alta calidad", apuntó el canciller.
Bolivia busca que la CIJ obligue a Chile a negociar de buena fe la restitución de una salida soberana al mar que el país andino perdió en guerra a fines del siglo XIX. Chile ofreció retomar los lazos diplomáticos sin condiciones, después de que en los primeros días de julio, durante su visita a Bolivia, el papa Francisco instara a ambos países a dialogar para resolver sus diferencias.
Las relaciones a nivel de embajadores entre ambas naciones están suspendidas por decisión de Bolivia desde 1962, salvo un breve paréntesis entre 1975 y 1978.
