El subsecretario y ministro (s) del Interior, Rodrigo Ubilla, se refirió este lunes a las críticas que ha recibido la gestión del Gobierno respecto a la emergencia registrada en la zona norte del país, afirmando que "nadie que haya estado en terreno ha criticado" y que "Twitter no es el mejor instrumento para manifestar una opinión seria respecto a la forma como el gobierno trabaja".
Según afirmaron desde La Moneda, apenas se pronosticaron las lluvias del invierno altiplánico, Sebastián Piñera monitoreo insistentemente la situación a pesar de estar de vacaciones, manteniendo hasta 15 comunicaciones al día con el Palacio de La Moneda, principalmente con el mismo Ubilla.
Respecto a las quejas de miembros de la oposición y del oficialismo por la supuesta lentitud en la declaración de catástrofe en la zona afectada por las lluvias, el subsecretario aseguró que no han recibido críticas de los políticos que están en terreno viendo el trabaja del Gobierno.
"El Presidente en ningún momento, y lo ha demostrado en sus 10 días de vacaciones, ha dejado de monitorear u observar (la situación). No he escuchado a ninguna persona de oposición que haya estado en terreno una crítica de ese tipo. He estado con parlamentarios y alcaldes del Gobierno y de oposición. De los que están en terreno, no he escuchado ninguna observación", dijo Ubilla.
"A lo mejor del Twitter de alguno que está de vacaciones y eso de la distancia a lo mejor no lo ayuda a percibir la acción sistemática, organizada, proactiva que ha tenido el presidente y todo su gobierno. Yo creo que Twitter no es el mejor instrumento para manifestar una opinión seria respecto a la forma como el Gobierno trabaja", agregó el subsecretario del Interior.
Uno de los parlamentarios que manifestó reparos por la forma en que el Gobierno ha manejado la emergencia es el senador por Antofagasta y ex candidato presidencial Alejandro Guillier, quien a través de su cuenta de Twitter aseguró que "mientras la Región sufría la tragedia, el Gobierno demoró días en convencerse, otra muestra del centralismo asfixiante".
