Trasaladaban a la gente "en tiempos bastantes cortos a su destino", aseguró Carlos Soto.
Sin embargo, esto era "en términos muy riesgosos".
El presidente de la comisión de Transportes del Colegio de Ingenieros, Carlos Soto, aseguró que las antiguas "micros amarillas" sólo tenían un punto a favor versus Transantiago: eran rápidas y llegaban hasta "la puerta de la casa".
"Las micros amarillas tenía una sola cosa mejor que el Transantiago y era que la oferta de servicio se hacía estrictamente en términos de atención a clientes y, por lo tanto, le ponían el autobús muy cerca de la casa", señaló el experto.
"Lo llevaban en términos muy riesgosos pero en tiempos bastantes cortos a su destino y la gente apreciaba eso", añadió el especialista, aunque aclaró que "llevarle al autobús casi a la puerta de la casa (...) nos llevo a tener cerca de 9 mil máquinas en Santiago, eso es insoportable", dijo.
Respecto del aumento tarifario que ha registrado el transporte público durante el presenta año, Soto expresó que "el subsidio que existe baja la tarifa, nosotros somos más partidarios de un subsidio a la oferta, o sea que el subsidio llegue directamente a los usuarios".
"No tenemos una cifra como no la tiene nadie, las que se tienen son estimativas, nosotros tenemos la sospecha de que (la evasión) es mucho más grande porque hemos detectado que en algunas zonas periféricas simplemente no paga nadie", sentenció el ingeniero.
