Según el organismo, una disputa entre dos internos originó el ataque y que, pese a ser separados, "fueron reunidos y un funcionario de Gendarmería los dejó, cerró la reja y avisó de la llegada de la víctima".
La acción interpuesta es por el delito de apremios ilegítimos.
El Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) interpuso una querella ante el Juzgado de Garantía de Colina por la agresión que sufrió un reo del Centro de Cumplimiento Penitenciario Colina 2, por parte de un grupo de presos que le amputaron un dedo.
El hecho ocurrió el pasado 13 de diciembre y fue registrado en un video que luego se viralizó. Por ello, el afectado debió ser trasladado por funcionarios de Gendarmería hasta el Hospital San José.
La acción criminal es por el delito de apremios ilegítimos y, de acuerdo a un comunicado del organismo, "se habría generado por una disputa entre dos internos quienes luego de un altercado fueron separados".
Pese a lo anterior, "al día siguiente fueron reunidos y, una vez juntos, un funcionario de Gendarmería los dejó, cerró la reja y avisó al interior del lugar de la llegada de la víctima".
"Entonces vino la agresión. Mientras un segundo funcionario de Gendarmería resguardaba el acceso a esta parte de la cárcel, la víctima recibió el ataque de cinco personas que le causaron heridas penetrantes en un muslo y en la zona costal. Luego la obligaron a poner su dedo índice derecho al borde de un balde y se lo cortaron con un puñal", agrega el relato del INDH.
El afectado se encuentra actualmente en la Oficina de Investigaciones Internas (OSI) del Centro Penitenciario (CP) de Rancagua, de acuerdo al escrito, que agrega que fue entrevistado por un equipo de la sede O'Higgins.
"Hay que recordar que es deber del Estado velar por la integridad y seguridad de quienes permanecen privados de libertad, bajo su custodia y resguardo", recalcó el Instituto.
