Los cuerpos de Andrés Ponce y Yoshua Osorio, dos de las personas halladas entre los escombros de la fábrica Kayser de Renca el 20 de octubre de 2019, serán exhumados el 1 y 2 de febrero, tras una petición de sus familias.
Los deudos afirman que sus causas de muerte nunca fueron esclarecidas y que "existieron graves imprecisiones en las autopsias, así como también falta de antecedentes que dilucidaran las condiciones en que habrían perdido la vida" no sólo ambos, sino también Manuel Muga, Julián Pérez y Luis Salas.
Cuando fueron encontrados, los fallecidos "no solo estaban calcinados por el incendio" que se registró en la fábrica, "sino que además presentaban impactos de bala, fracturas y otros daños atribuibles a terceros", señalaron los familiares en un comunicado.
En noviembre de 2019, el médico forense Luis Ravanal señaló a Cooperativa que el Servicio Médico Legal cometió omisiones en el caso de Osorio -de 17 años al momento de su muerte-, ya que su cadáver presentaba tres orificios, pero el documento de la autopsia establecía que su deceso ocurrió por "asfixia por intoxicación por gases de incendio".
PIDEN LEVANTAR UN SITIO DE MEMORIA
Frente a estas interrogantes, y con apoyo de la senadora Fabiola Campillai y los diputados Andrés Giordano -que promovió una comisión investigadora sobre el caso- y Claudia Mix, los familiares de los fallecidos presentaron una solicitud al Consejo de Monumentos Nacionales para levantar un sitio de memoria, que sería el primero por vulneración a los derechos humanos post dictadura.
Este gesto serviría "para iniciar el proceso de reparación y ayudar a la comunidad, porque en Chile no podemos permitir que la memoria se borre", dijo Campillai.
Andrés Giordano explicó que la comisión investigadora "tiene todas las facultades para ampliar su rango investigativo a otros casos semejantes, porque lo ocurrido en la fábrica Kayser no son casos aislados".
En esta línea, Claudia Mix señaló el caso de Maicol Yaguar, un joven de 22 años que "fue encontrado mutilado, sin un riñón, sin dentadura y sin extremidades" en el siniestro del supermercado Alvi de Maipú, "días después que bomberos ya había revisado el lugar".
