"Representa la crisis generalizada en salud pública que está pasando desde hace varios años", acusó la dirigenta Mónica Campos.
La movilización "es una cruzada de amor para nuestros pacientes" en un hospital que parece un "cité", aseguró en Cooperativa.
"Estamos siendo abandonados desde hace lo menos de una década", acusó.
Los médicos movilizados del Hospital Clínico San Borja Arriarán (HCSBA) revelaron las deplorables condiciones que presenta el recinto que, aseguran, se encuentra en una "situación crítica", principalmente por la falta de "sentido común" de las autoridades.
"El Hospital San Borja representa la crisis generalizada en salud pública que está pasando en nuestro país desde hace varios años (...) Es un problema estructural de gestión y de recursos nacional", denunció la presidenta del capítulo médico del establecimiento, Mónica Campos, en El Diario de Cooperativa.
Detalló que existe "falta de insumos, en nuestros pabellones falta material quirúrgico que no ha sido renovado en cinco años, (...) también 'los niños primero' dice nuestro Presidente, pero hay cuatro enfermeras atendiendo 82 camas pediátricas en urgencia, hay ventiladores no renovados en la UCI pediátrica, faltan recursos para matronas, enfermeras, TENS".
A ello complementó que pese a que "somos un hospital donde duplicamos los prematuros a nivel nacional, faltan camas, faltan cunas, falta espacio", lo que demuestra que "hay bastantes problemas que resolver y que nuestras autoridades han dicho que no hay recursos para aquello".
Campos, que resalta la unión de todos los estamentos del hospital en esta movilización, criticó en ese marco la falta de respuesta de las autoridades, pese a las constantes gestiones que –asegura- han hecho para que atiendan los problemas en el recinto: "Estamos esperando que el ministro se apersone".
Sólo "a raíz de que salimos en televisión el 10 de enero -apuntó-, se nos facilitaron 10 monitores fetales que los jefes llevaban tres años pidiéndolos por escrito, y un tercer médico para hacer un turno a estas mamás que llegan a atenderse (por embarazos), eran cuatro mil partos hace un año y medio, pero ahora son seis mil partos".
Un "cité" sin espacio
"Parece que estamos en un terremoto, y no hay ninguna medida de contingencia (...) nosotros queremos sólo sobrevivir hasta que tengamos nuestro hospital nuevo, éste es como un cité y no cabemos", sostuvo.
"Todos tenemos el corazón puesto en esto hasta el final, es una cruzada de amor para nuestros pacientes, y nuestros pacientes tienen que entender y empezar ellos a pedir sus derechos, el centro de nuestra discusión son ellos", manifestó, porque "estamos siendo abandonados desde hace años, esto no es de ahora, por lo menos de una década".
Durante la pasada jornada los trabajadores movilizados, liderados por Campos, llegaron hasta el Ministerio de Salud para exigir que la mesa de trabajo con las autoridades apruebe el petitorio para acabar con la crisis que afecta al recinto hospitalario.
