El establecimiento sufrió graves daños estructurales luego del 27-F.
La inversión del proyecto supera los 3.900 millones de pesos.
Según planificación, la obra debería ser entregada el 24 de junio.
El Liceo Abate Molina de Talca se encuentra en la etapa final de su reconstrucción, luego de que quedara con graves fracturas por el terremoto 27-F. El nuevo edificio cuenta 3.400 metros cuadrados y 32 salas de clases.
El rector de establecimiento, César López, informó que "estamos en este momento en la etapa final. De acuerdo a la planificación, el 24 de junio debiera terminarse esta obra y ahí quedaría el paso de las revisiones propias de una obra de esta envergadura".
Adema declaró que espera que el establecimiento pueda ser ocupado de vuelta de vacaciones. "Es lo que se ha conversado con las autoridades de educación y con el Municipio, por lo tanto por allá por agosto –de no mediar ningún imprevisto-, debiéramos estar nosotros en condiciones de tener desocupado el patio central de las aulas modulares y ocupando el sector nuevo que está siendo terminado en este momento", afirmó.
En tanto el vicepresidente del Centro General de Alumnos, Matías Arenas, aseguró que "nosotros anhelamos mucho volver a nuestro liceo. Volver a tener el espacio que teníamos para poder desarrollarnos mejor académicamente como es el emblema de un alumno del Liceo Abate Molina".
"La verdad es que ha avanzado mucho desde la última vez en que cuando nosotros vinimos a fiscalizar o a revisar cómo iba. Se ve muy bien, se ve bastante bonita. Está cumpliendo con las expectativas que nosotros queríamos o que el Liceo en sí tenía como expectativa", indicó Arenas.
Durante los tres años que ha durado la reconstrucción, los alumnos del establecimiento han tenido clases en aulas modulares.
La inversión en este proyecto de infraestructura, financiados por el Ministerio de Obras Públicas, supera los 3.900 millones de pesos.
La nueva reconstrucción, a cargo de una empresa española, cuenta con 32 salas de clases, un amplio casino, gimnasio con graderías portátiles para 120 personas, la recuperación de la antigua piscina temperada, cambio de calderas, todo en una superficie de 3.400 metros cuadrados.
