"Si me junto con la oposición para hablar de la agenda social, será porque se juzga que es insuficiente", dijo el ex presidente de RN.
El ex presidente de RN insistió en sus cuestionamientos a Mario Desbordes.
El ex presidente de RN, Carlos Larraín reiteró sus críticas al actual presidente de la colectividad, el diputado Mario Desbordes, por la reunión que sostuvo con líderes de los partidos de la ex Concertación.
En conversación con El Diario de Cooperativa, el ex parlamentario sostuvo que es partidario de conversar, pero mientras existan puntos comunes, cosa que no ve en las colectividades opositoras.
"Estoy por la conversación y el diálogo, creo que es utilísimo, (...) pero hay que buscar un auditorio con un set de ideas mínimo y compartido. Entonces cuando veo que la propia oposición echa abajo a los ministros, formula acusaciones contra el intendente (Felipe Guevara), bloquea el aumento de la cotización para la mejora de las pensiones, no veo afán de concordia", dijo Larraín.
"Se puede hablar con cualquiera, pero tenemos que tener un vocabulario común, y hoy por hoy el tema de la estabilidad y la paz social es muy importante, (...) entonces, para recuperar la estabilidad, hay que hablar con la gente que se juega por la estabilidad y desgraciadamente he visto que desde la oposición no ha habido muchas señas", recalcó.
Las conversaciones del presidente de RN con partidos opositores generaron la molestia de la UDI, Evópoli y también del Gobierno, que de algún modo cuestionaron la cita.
Mientras, Larraín consideró que la mencionada reunión de Desbordes con parte de la oposición también debilita al Gobierno.
"Si me junto con la oposición para hablar de la agenda socioeconómica será porque se juzga que la agenda socioeconómica es insuficiente", reflexionó el ex timonel de RN.
Por ello, el ex parlamentario cree necesario reforzar al Ejecutivo, que aparece debilitado luego de las magras cifras de respaldo que evidencian diversas encuestas.
"Se pueden tranquilizar las aguas reforzando al Gobierno, yo no soy devoto de este Gobierno, pero creo que juega un papel importante en estabilizar el cuadro. El Gobierno está muy debilitado, tenemos serios problemas de orden público, hay una disparada de las expectativas absolutamente estrambótica, me parece que hay que apostar por un Ejecutivo más activo y con las espaldas más anchas", añadió.
