El abogado constitucionalista y vicepresidente de la Convención Constitucional, Jaime Bassa, salió al paso de las críticas del Gobierno a la declaración en que el órgano ciudadano pide liberar a los detenidos por delitos en el contexto del estallido social, los denominados "presos de la revuelta social"; acelerar la tramitación del proyecto de ley de indulto que está en el Congreso Nacional y la desmilitarización del Wallmapu.
El documento, que fue respaldado ayer por 105 de los 155 convencionales, consta de seis puntos y destaca la solicitud al Poder Ejecutivo y Legislativo de colocar urgencia al proyecto de ley que otorga un indulto a quienes se encuentran presos por esos hechos, discusión que marcó las últimas jornadas del organismo.
Este viernes, el ministro vocero de Gobierno, Jaime Bellolio (UDI), insistió en que en Chile "no existen presos políticos" y que "donde sí existen presos políticos es en Cuba, es en Venezuela, en Nicaragua; donde hay dictaduras asesinas".
Al respecto, Bassa comentó en Lo Que Queda del Día de Cooperativa que "los agentes del Estado siempre niegan la existencia de los presos políticos, siempre, siempre, siempre; estando en dictaduras o en democracias. Y lo que esperamos nosotros es que la declaración genere un efecto político".
"Nosotros no tenemos competencias ni atribuciones respecto de las personas que están privadas de libertad ni tampoco respecto de los juicios que están siendo llevados adelante, pero sí somos una factoría política importante; tan importante que, de hecho, el Senado ya está evaluando la posibilidad de crear una comisión para poder el tema de los presos de la revuelta social", sostuvo el convencional por Valparaíso.
En ese sentido, dejó en claro de que "no es que nosotros vayamos a arrogarnos competencias de otros órganos del Estado, porque entendemos la diferencia que hay entre poder constituyente y poderes constituidos, pero sí somos un actor político importante que es capaz de levantar puntos que los poderes constituidos no pueden levantar", enfatizó.
MINORÍAS
Tras las acusaciones de constituyentes de derecha que reclaman "arbitrariedad" y "falta de transparencia" en primeras votaciones de la Convención, Bassa planteó que, "evidentemente, a lo largo de este año vamos a ver que la Constituyente tome una serie de decisiones que van a estar dotadas de un grupo importante a favor y de un grupo más bien minoritario en contra, y eso no tiene nada de malo. Piensa que la declaración por los presos de la revuelta social fue aprobada con más de 100 votos, luego de todo un día de deliberación".
"Este es el típico caso que nos permite empezar a entender cuál es la diferencia entre el ejercicio de la autoridad y el autoritarismo o entre el conflicto y la diferencia: en una democracia, siempre va a haber alguien que pierde una elección y la clave no está en garantizar que aquellas personas que pierdan las elecciones ganen, sino que puedan participar de esos procesos en condiciones de igualdad", señaló.
Y reforzó la idea que "no es que estemos postergando arbitrariamente ciertas decisiones o haciendo oídos sordos a ciertas propuestas; simplemente hay que ir avanzando a medida que las ideas se presenten y no por gritar más fuerte vas a tener derecho a que tu propuesta se lea primero".
"Las solicitudes han llegado, se ha dado cuenta de ellas, pero el punto es que no tenemos plenamente formalizado todavía un proceso de deliberación que nos permita conducir esas solicitudes. Llevamos apenas dos días de funcionamiento normal. Piensen que el lunes esto fracasó; el martes con la presidenta nos tuvimos que dedicar a construir una red de soporte institucional para que la Constituyente funcionara; y sesionamos miércoles y jueves", recordó.
