Se trata de 65 bolivianos sin visa de trabajo en la empresa Paola Espinoza Limitada de Molina.
La ministra del Trabajo, Evelyn Matthei, señaló que "no estamos dispuestos a que se maltrate trabajadores chilenos o extranjeros".
Matthei señaló que hay "un delito criminal llamado trata de personas con fines laborales".
La PDI investiga a una empresa del sur del país que, según la policía, ha empleado de forma ilegal, es decir sin visa de trabajo, a decenas de bolivianos, informó este viernes el Gobierno, que indicó que este caso puede constituir "trata de personas y violación a la Ley de Extranjería".
El subsecretario del Trabajo, Bruno Baranda, informó de la situación, luego que la PDI constatara que de un grupo de 102 bolivianos, 65 trabajaban de forma ilegal para la empresa "Paola Espinoza Limitada" dedicada al montaje de torres de alta tensión.
"Nos parece inapropiado que no se respete la ley para todos los ciudadanos chilenos y extranjeros", afirmó Baranda, quién agregó que se investiga a la empresa por supuestamente haber tenido en su plantilla a más de 200 bolivianos desempeñándose ilegalmente en la zona de Cumpeo, cercano a la localidad de Molina, en la Región del Maule.
La autoridad sostuvo que la firma podría ser denunciada a la justicia por trata de personas y violación a la Ley de Extranjería y Migración al no contar los trabajadores bolivianos con una visa laboral.
Baranda dijo que ya se determinó que los trabajadores bolivianos tenían espacios de descanso con deficiencias higiénicas, por lo que la empresa se arriesga a fuertes multas.
En tanto, la ministra del Trabajo y Previsión Social, Evelyn Matthei, dijo que "si a una persona se la contacta en el extranjero, se le paga el pasaje, se la trae a Chile y no tiene visa para trabajar o no se le paga lo que corresponde", hay "un delito criminal llamado trata de personas con fines laborales".
"Eso lo está determinando la Fiscalía y la PDI. Como Gobierno de Chile, no estamos dispuestos a que se maltrate trabajadores chilenos o extranjeros", enfatizó.
Matthei aseguró que su cartera, a través de la Dirección del Trabajo Regional, está colaborando para esclarecer esta situación ya que "estos ciudadanos bolivianos son seres humanos, tienen dignidad y merecen todo nuestro respeto y apoyo", aseveró.
Tráfico ilícito de inmigrantes
Por su parte, la PDI descubrió el caso en marzo pasado al detectar que los 102 trabajadores residían en solo dos domicilios de la ciudad de Curicó.
Funcionarios verificaron que los ciudadanos altiplánicos eran reclutados en Bolivia y traídos a Chile, los que ahora serían víctimas se esta supuesta trata de personas.
El prefecto Alfredo Chiang, jefe nacional de Extranjería y Policía Internacional de la PDI, detalló que "en dos domicilios residían 102 personas. Tenemos una sola empresa que estaría siendo la que tiene bajo su responsabilidad el cuidado y administración de los ciudadanos bolivianos".
Añadió que "tenemos antecedentes de que eran reclutados en Bolivia por una empresa que después los traía hacia Chile. Estamos hablando de dos delitos que eventualmente podrían estar presentes en esta investigación: El tráfico ilícito de inmigrantes y, por otro, la trata de personas".
"Por eso es que se constituyó en Curicó la Brigada Investigadora de Trata de Personas para establecer fehacientemente la condición y situación de cada uno de ellos", concluyó.
De momento, no hay detenidos por esta situación y la PDI ya denunció el caso al Ministerio Público.
